Desde principios de 2018, el Museo Escolar de Pusol ha reactivado las entrevistas a los vecinos y vecinas de la partida y del resto del municipio de Elche (actividad iniciada hace años), con el fin de atesorar la memoria oral y salvaguardar la cultura tradicional. Cada una de estas historias de vida es una fuente oral directa, que facilita poder llevar a cabo el estudio etnográfico de la comunidad del entorno.

Recientemente, empleamos estas declaraciones como material que viene a complementar las exposiciones temporales. Se ruedan las entrevistas de las personas invitadas a participar mientras relatan sus vivencias, para después difundir estos testimonios en nuestras redes sociales. Este ejercicio nos permite dar riqueza y refuerzo al discurso de las exposiciones transitorias que vamos planteando.

La primera exposición en la que llevamos a la práctica esta actividad fue en Aparadoras: la conciliación de dos vidas, clausurada el pasado 5 de mayo. Esta muestra buscaba reflejar esa doble vida que estas mujeres llevaban a cabo de manera simultánea: la labor del aparado en casa y la vida familiar. Algunos miembros del equipo del Museo Escolar entrevistamos a Mª del Carmen Fernández Gimeno, aparadora desde hace 53 años, y a su hijo Cristóbal Serrano Fernández. Ambos compartían con nosotros cómo era la vida durante la etapa de niñez de Cristóbal, cuando su madre tenía que dejar su máquina de aparar para prepararle la merienda y a continuación volver de nuevo a su puesto de trabajo.

La exposición temporal actual comisariada por el alumnado del colegio La escuela como nos la contaron, aborda la escuela de Elche a mediados del siglo XX. El discurso expositivo de esta muestra es el resultado de una serie de entrevistas, llevadas a cabo por el propio alumnado, a docentes que estuvieron ejerciendo desde los últimos años del franquismo hasta principios del siglo XXI. Esta vez, para fomentar y difundir esta exposición en redes sociales, invitamos a Mª Dolores Maciá, antigua alumna del colegio de Puçol durante la década de los 60. Mª Dolores no solo nos permitió salvaguardar su testimonio oral, también trajo las fotografías de su etapa escolar que con mucho gusto el Museo Escolar se encargó de escanear, para incluirlas en su fondo fotográfico.

La colaboración de la comunidad en nuestro proyecto educativo-museístico es un pilar fundamental para poder desarrollar nuestra labor como museo etnológico. Recoger testimonios de personas que vivieron otros tiempos se ha convertido en una de nuestras prioridades, no solo para darles difusión sino para continuar aprendiendo de una época que muchos no hemos vivido pero que nos es tan cercana…

Autor: Borja Guilló, técnico del Museo Escolar.